
Disfruta las patatas sin miedo
En las últimas décadas se ha relacionado la patata con el sobrepeso, la obesidad y la diabetes en los países desarrollados, debido al elevado índice glucémico (IG) de la patata (IG de 70, siendo 100 el máximo, marcado por la glucosa). Esto sugiere que la patata puede favorecer el exceso de azúcar en la sangre, la obesidad y el desequilibrio metabólico.
Sin embargo, la evidencia científica actual descarta que la patata sea la culpable de la aparición de estos problemas de salud, ya que debe tenerse en cuenta la carga glucémica de la patata, que es un valor más preciso que el IG porque considera muchos otros aspectos como el tamaño de la ración, la proporción de agua, hidratos de carbono, fibra y proteínas de la patata.