La primavera es una estación maravillosa que simboliza el renacimiento y la renovación. Las temperaturas comienzan a subir, los días se alargan y las noches se acortan. Es una época de clima templado y agradable. Las plantas florecen, los árboles brotan y los animales salen de su hibernación. Es un momento de gran actividad en la naturaleza. Es una época crucial para la siembra de muchos cultivos, como mencionamos antes con las patatas. La tierra se prepara para una nueva temporada de crecimiento.
La primavera para nosotros, y en general para gran parte de los agricultores, significa un nuevo comienzo, una nueva etapa.
Se inicia esta etapa con la siembra de la patata, con mucha ilusión y con mucha incertidumbre. ¿Cómo vendrá el clima? ¿Tendremos que hacer frente a muchas plagas? ¿Será buena la cosecha de este año?.
Como ves, la agricultura está muy lejos de ser una ciencia exacta (aunque tiene mucho de ciencia pero con algunas variables que no podemos controlar). Después de años de experiencia y un conocimiento profundo de nuestros cultivos, tratamos de ajustar todos los parámetros que determinan que la cosecha sea un éxito. Aún así, a veces, la naturaleza nos pone pruebas difíciles de superar. Porque para conseguir un alimento de calidad, es necesario invertir mucho esfuerzo, y la naturaleza quiere que lo valoremos.

Zamora no se ganó en una hora
Antes de iniciar la siembra de la semilla de patata, llevamos meses preparando tanto la tierra como la maquinaria que vamos a emplear. Estos son los pasos que nos han llevado a este momento:
- Planificación: Antes de iniciar la campaña, casi cuando aún no ha concluido la anterior, tenemos que planificar que tierras que vamos a sembrar este año.
- Rotación de cultivos: Por rotación de cultivos, sólo se puede sembrar patatas en la misma tierra uno de cada cinco años. Mientras, se cultivan en esas parcelas, especies de ciclos y necesidades nutricionales distintas para mejorar la calidad del terreno. En nuestro caso, cultivamos cereales (trigo, cebada, centeno, colza, girasol) y leguminosas (garbanzos) que aportan nutrientes al suelo que posteriormente mejoraran la cosecha de patatas.
- Estudio del suelo: Analizando la composición del terreno, podremos saber con exactitud que nutrientes aportarle antes de la siembra.
- Estudio del agua de riego: la patata que cultivamos es de regadío. Realizamos, mediante aspersión, un uso eficiente de los pozos que poseemos. Regamos con la cantidad de agua estrictamente necesaria para el correcto desarrollo de la cosecha.
- Labranza mínima: Reduce la perturbación del suelo para mantener su estructura y biodiversidad. Esto ayuda a retener la humedad y a prevenir la erosión.
- Cultivos de cobertura: Plantamos cultivos de cobertura como leguminosas, colza o centeno para proteger el suelo, mejorar su fertilidad y aumentar la materia orgánica.
- Compostaje y abonos orgánicos: Utilizamos estiércol de pollo como abono orgánico para enriquecer el suelo con nutrientes y mejorar su estructura.
Cómo ya te hemos contado en varias ocasiones, desde hace unos años practicamos la agricultura regenerativa que es una práctica agrícola que se centra en la regeneración del suelo, la biodiversidad y la salud del ecosistema; y también la agricultura de conservación, que se enfoca en la preservación del suelo y la reducción de la erosión. Ambos enfoques buscan crear sistemas agrícolas más sostenibles y resilientes.
Este es uno de los motivos por el que nuestros tubérculos son tan especiales.
Si quieres un mañana, siembra tu semilla
Y hecho todo esto, ya podemos sembrar nuestra semilla de patata certificada. Esta semilla de patata la compramos a Cosidel y Patatas Catalán. Sólo trabajamos con semilla de patata 100% española, de Castilla y Léon.
Este año vamos a contar con tres variedades:
Patata variedad Agria
La nuestra, la de siempre, la todoterreno de la cocina, de inigualable sabor en cualquier plato y la preferida de la hostelería. De origen 100% español, va a constituir el 90% de nuestro cultivo de patatas durante esta campaña. Antes de la siembra, nos gusta seleccionar la semilla de patata para ver que está en perfecto estado. Podrás encontrar toda la información sobre nuestra patata agria aquí.
Patata variedad Vitelotte
Nuestra patata violeta gourmet. La patata Vitelotte o patata violeta recibe este nombre por su tonalidad violácea y, además de lo vistoso de las recetas que podemos preparar con ella, tiene un aroma, unas propiedades y una textura que la diferencian de las patatas tradicionales. Puedes encontrar más información sobre nuestra patata violeta y sus formas de cocinarla aquí.
La patata Vitelotte no solo es nutritiva, sino que también añade un toque de color y originalidad a tus platos.

Patata variedad Lily Rose
La patata Lily Rose es una variedad interesante y distintiva debido a su piel y carne de color rojo. Aquí tienes algunos detalles sobre esta variedad:
- Color: Tiene una piel y carne de color rojo brillante, lo que la hace visualmente atractiva y única.
- Forma: Los tubérculos son de tamaño mediano y forma ovalada.
- Textura: Es una patata firme, adecuada para hervir, cocinar al vapor y hacer chips.
- Sabor: Tiene un buen sabor y una presentación agradable, lo que la hace ideal para una variedad de platos.
- Resistencia: Presenta una resistencia moderada a virus y sarna, y una resistencia media al tizón.
En cuanto a sus usos culinarios, es perfecta para hervir y cocinar al vapor debido a su textura firme. También es adecuada para hacer chips y otras frituras.
La patata Lily Rose no solo es atractiva visualmente, sino que también es versátil en la cocina.

Siembra surco a surco
Cada semilla de las tres variedad de patata mencionadas anteriormente, se siembra a una distancia aproximada de 45 cm una de otras. En nuestra experiencia, esta distancia favorece el desarrollo de las patatas y no genera competencia entre semillas. Hay que tener en cuenta que, de cada semilla de patata, nacerán entre 5 y 7 nuevas patatas (entre 3 y 4 en el caso de la patata violeta y patata rosa). Se entierran a una profundidad aproximada de 20 cm en un surco. La patata es un tubérculo y necesita oscuridad para su óptimo crecimiento. Esta profundidad es perfecta para el desarrollo de nuestras patatas.

Hace dos campañas dijimos adiós a nuestra vieja sembradora de patatas de un surco para dar la bienvenida a una nueva máquina de siembra de patatas de doble surco. Esta nueva máquina, conectada al GPS nos proporciona una precisión de siembra muy alta, sin apenas fallos en los surcos. Además, al ser de doble surco, tardamos la mitad de tiempo en sembrar, por lo que ahorramos en combustible, tiempo y recursos. Como ves, la tecnología es una gran aliada de la agricultura y nos permite realizar nuestro trabajo cada vez mejor, tanto a nivel de cosecha como a nivel trabajador.
Aún así, hay veces que la tecnología no puede ayudarnos, y la patata violeta se siembra en una pequeña zona de la parcela donde no puede acceder la máquina y hay que aprovecharla. Por lo que un año más, esta variedad de patata se siembra con estas manitas. Lo mismo ocurre con la patata rosa.
La paciencia es la madre de la ciencia
Ahora “sólo” nos quedan por delante meses de cuidados constantes hasta que llegue el momento de la cosecha. Lo primero que viene es colocar los tubos de riego en las parcelas sembradas de patatas (nunca sabemos cuando llegará el calor intenso y nos tocará regar). Como nuestros cultivos rotan cada año, no tenemos instalaciones fijas de riego, por lo que tenemos que montar y desmontar el sistema en cada campaña. Es un trabajo pesado y laborioso, de esos que te da pereza solo de pensarlos, pero es necesario.
¿Un trabajo anticuado?
Yo también lo pensaba, pero realmente no es así. Tractores con GPS, drones para aplicación de fitosanitarios, cuaderno de campo digital, ¿lo sigues pensando?. Como ves, el trabajo agrícola no dista mucho de otros trabajos, se planifica como un proyecto, se estudian los parámetros que determinarán el éxito de la cosecha, se hará frente a imprevistos que surjan, usamos la tecnología para facilitar los trabajos antaño manuales.
“Todas tus acciones son una semilla que tarde o temprano dará sus frutos”